Los rusos en Letonia

Una reflexión sobre el asunto de los rusos en Letonia, publicada en Intelligent.ru por Konstantin Mikhailyuk.

¿Cuántos rusos hay en Letonia? Oficialmente el 30% de la población. A estos hay que añadir otras minorías rusófonas (ucranianos, judíos, bielorrusos) y alcanzarán el 40%. La mayoría de ellos viven en grandes ciudades. Por ejemplo, se puede vivir en Riga durante años sin oir ni una palabra en letón.

La mayoría trabajan en compañías rusas o internacionales. Para tratar asuntos oficiales hay que utilizar obligatoriamente el idioma oficial, el letón, y para eso hablan un letón rusificado, que es su relación con el mundo administrativo. Raramente lo utilizarán en otras situaciones, porque van a tiendas rusas, compran periódicos rusos, ven canales de televisión en ruso, leen noticias en internet en ruso. Están dentro de la ley. La economía crece. Viven en el sector ruso de la Unión Europea. Se sienten ninguneados por los turistas extranjeros que invaden las calles de su ciudad. Y sus amigos moscovitas les dicen con envidia una vez al año que a ellos también les gustaría vivir junto al mar como ello.

En ciudades como Riga, donde más del 70% de los habitantes son rusos, o en Daugavpils, donde llegan al 95%, deberías buscar con aínco un encuentro con los misteriosos letones para descubrir, para tu sorpresa, que son una clase de gente diferente a los que viven cerca de ti.

Ahora, ¿cómo cree usted que se sienten los letones en esta situación? ¿Si en su propio país, vayan donde vayan son conscientes de situación de inferioridad? Decididamente, han prohibido los carteles de las tiendas en ruso. Han introducido multas por falta de conocimiento del letón. Han denegado la ciudadanía a cientos de miles de habitantes de la república (los llamados “aliens”), han ingresado en la NATO para proteger su frontera oriental del “vecino del este” (así llaman a Rusia). Pero siguen sintiéndose en una fortaleza asediada. Es algo que se ve en todo. En su deseo de cerrar las escuelas rusas, de prohibir el uso público del ruso, en ingresar en cualquier organización internacional imaginable en la que Rusia y los rusos no sean miembros. Pero cuantas más medidas tomen, se sienten con mayor paranoia el miedo de que los pasos que toman sean inútiles.

Y lo que es peor, con cada año que pasa se naturalizan más rusos (porque obtienen la ciudadanía, porque aprueban exámentes, etc.) y toman parte en las elecciones. Y nada les induce a votar por los partidos nacionalistas letones. ¿Qué hacer? El gobierno letón no tiene otra alternativa que hacer más difícil la posibilidad de la naturalización, haciendo incluso más difíciles e inventando nuevas reglas para obtener la ciudadanía. ¿Cree usted que disfrutan cuando el parlamento europeo discute las complicadísimas normas de ciudadanía en Letonia? Ciertamente no, pero ¿cómo pueden mantener el poder en la república y asegurarse de que no van a tropezar con rusos cada vez que se aventuran a salir? Esto es totalmente imposible.

Pero el mayor problema es el del dinero. Letonia es cada vez más rica. Tomemos la vivienda, por ejemplo. Los precios de Riga son ya casi similares a los de Moscú, y dentro de poco pueden superarlos. Ya no hay alojamientos en las playas de Jurmala. Y la gente que vive allí son antiguos habitantes de villas de lujo en las afueras de Moscú, dueños de compañías internacionales y banqueros locales, no son letones.

Los rusos no se encuentran con problemas de idioma en la república. Cualquier problema puede resolverse a nivel privado. Por algo la república tiene un puesto de honor en la lista de países corruptos de la Unión Europea.Aquí todo el mundo conoce a alguien, y ¿quién podría rehusar ayudar a un hombre de negocios de éxito?

¿Por qué los rusos son tan partidarios de ir a Letonia?

Hay varias razones para ello:

• Igual que en Rusia, todo se puede solucionar con dinero;

• Nunca te tratarán de manera ruda, te invitarán a ir a los tribunales;

• a pesar de vivir en la Unión Europea, no hay necesidad de aprender ni una palabra en otro idioma;

• sus negocios y dinero están protegidos por la NATO y los burócratas europeos de cualquier revolución en Rusia;

• y posiblemente haya algunos amigos “soviéticos” wue vivan ahí, con los que estuvieron en el colegio, en la mili, antiguos colegas.

Precisamente por eso, según datos oficiosos, los rusos han invertido 4000 millones de dólares en Letonia. ¿Qué significa eso para una república de 2 millones de habitantes? Es fácil hacer las cuentas. Pero eso es si eres rico. ¿Pero qué pasa si eres un ruso ordinario, nacido y que vive en Letonia, cuyos padres llegaron a mediados de los años cuarenta? Entonces tendrás incontables problemillas. Pare empezar, el ser un “alien”, una persona que no tiene derecho a trabajar en la administración pública, a ser policía, trabajar en un ministerio, ser bombero u otros trabajos similares. Eres sosopechoso de deslealtad, las autoridades no te quieren como ciudadano. Si los rusos fueran el 10% de la población obtendrían sis esfuerzo la ciudadanía. Tendrían sus partidos nacionales pigmeos y podrían pelearse por un lugar bajo el sol. Pero si los rusos, además de controlar los grandes negocios, pudieran participar en las elecciones, ¿qué harían los pobres letones?

Cuando el ruso se convierta en el segundo idioma oficial de Letonia, y eso sucederá tarde o temprano, no es exagerado decir que los estados bálticos se habrán convertido en una zona offshore europea para los rusos que no quieran vivir en Rusia. ¿Y qué clase de futuro tienen los letones en esa zona? Poco envidiable, por decirlo suave.

¿Y qué es lo que piensan los propios letones de su estado? Viven en una comunidad cerreda. Leen periódicos en letón, internet en letón; ven la televisión letona y hacen sinceros esfuerzos por comprender para qué necesitan la Unión Europea, si está llena de turcos y otras nacionalidades de mentalidad extraña. Cierto, ahora tienen la posibilidad de ir a Irlanda o Gran Bretaña a trabajar, lo que ya han hecho cerca de cien mil letones, pero los propios irlandeses han empezado a quejarse porque no les gusta esa gran cantidad de esquiroles en sus fábricas. Incluso han declarado una huelga general intentando deshacerse de los letones. Y se trata de los irlandeses, que durante siglos han trabajado por una miseria en cualquier rincón del mundo.

Sin embargo los letones tienen otra esperanza en relación a los rusos, su pasado. Y esta esperanza no se materializará hasta que esté totalmente claro que Rusia se va a hacer tremendamente rica debido al petróleo. Aparte del hecho de que los oligarcas que han esquilmado a Rusia, como Yuri Shefler, Boris Berezovski y otros, estén intentando echar raíces en Letonia con sus millones. Los letones también sueñan con hacerse ricos a cuente de los rusos a los que no quieren dar la ciudadanía. Según ha anunciado el gobierno, el documento sobre los daños sufridos por Letonia debido a la ocupación soviética no estará listo hasta 2010. En los próximos 4 años, la comisión intentará reunir los datos de deportaciones, de letones sometidos a represalias políticas y el cómputo de daños sufridos por el pueblo, la economía, la esdera social, el medio ambiente, la cultura y la ciencia de Letonia. Y eso significa que para 2010 como muy tarde Letonia tendrá preparada una demanda contra Rusia como heredera legal de la Unión Soviética por los daños sufridos por la “ocupación” soviética en 1939.

Y mientras Rusia tiene su petróleo y sus depósitos bancaros, la comunidad mundial apoyará a los países bálticos – por un claro interés en su multitrillonaria demanda (parece que será de esa cantidad)- el de privar a Rusia de su última esperanza de una vida confortable en el tercer milenio. Es decir, para acabar con todo el beneficio del petróleo y el fondo de estabilización del que Rusia está tan orgullosa.

¿Qué tipo de compensación están preparando los letones? Quieren recibir una compensación por cada prisionero político por una cantidad similar a la que los judíos recibieron de Alemania. También el dinero necesario para reasentar a toda la población rusohablante. Este proceso es la última esperanza de Letonia de ser un estado europeo enano monoétnico. Sin embargo, parece que Moscú está preocupado por que este proceso sea inevitable. Así este año se han destinado 6000 millones para realojar habitantes de Letonia en la región de Kaliningrado. Además, el programa ha sido diseñado por el director de relaciones interregionales y culturales con el extranjero, Modest Kolerov. En una entrevista, este político dijo literalmente: “las autoridades locales están muy interesadas en la repatriación en masa de habitantes de los países bálticos. Se les ofrecerán las mejores condiciones”. Repatriación significa la vuelta a su país de gente que residencia permanente o por otra razón se encuentra en otro estado. Eso significa que Moscú misma ya ha admitido mentalmente su derrota en este terreno.

Es por eso que Yevguenii Kuldyshev, coordinador de relaciones internacionales de “Rusia Unida” dice:”No puedo confirmar que la suma en cuestión sea de 200 millones de dólares, porque eso es lo que algún ministerio ha presupuestado. Pero el hecho indiscutible es que nuestras autoridades temen seriamente tener que repatriar a nuestros compatriotas. Continuarán destinando dinero a este fin, y no esporádicamente como hasta ahora. Desde ahora habrá una partida permanente en el presupuesto, según una ley”.

Así que para Rusia está claro cuál es el futuro de los estados bálticos. Y parece que nuestras autoridades prefieren ver la zona como una reserva étnica de pueblos bálticos que como un refugio para oligarcas que quieren evadir impuestos y responsabilidades legales, y los petulantes rusos que vieven en el extremo oriental de Europa serán colocados junto a sus homólogos en la propia Rusia. Después de todo, provienen del mismo estado. Ahora, ¿Qué dirigentes han sido más inteligentes? ¿los nacionalistas fascistas de Letonia o los bondadosos rusos? La comparación difícilmente agradará a Moscú. Hace 15 años que se disolvió la disolución de la “prisión de naciones”, la Unión Soviética. El asunto de los rusos étnicos que viven en Letonia no se ha solucionado mínimamente. Los rusos son no sólo una parte grande de la población sino una muy amplia. Una persona normal se preguntará por qué el problema se ha revelado insoluble. ¿Por qué no hay igualdad de derechos para todos? ¿Por qué no pueden todos los grupos étnicos vivir en la república? ¿o hay que culpar a las tendencias fascistas de los letones? ¿o son los rusos que no aceptan la nueva realidad? La respuesta tal vez haya que buscarla en alguna otra parte.